REINO DE DIOS
El Reino de Dios es el porqué de nuestra congregación. Nos sentimos llamadas a seguir a Jesús, anunciando el Reino de Dios en la historia.
Este es el modo de decir que Dios se hace presente en el mundo; que su proyecto de paz, amor, gozo y justicia se vuelven realidades concretas. No es ilusión ni utopía, sino entregar la vida haciendo gestos y proyectos de dignidad, libertad y paz, sabiendo que Él hace con nosotros.
AMOR A LA IGLESIA
En el desarrollo de nuestra misión queremos despertar un amor profundo a Cristo y a su Iglesia.
La fidelidad y unión con la Iglesia nos va descubriendo su ser y su querer en cada momento histórico.
Porque es en la gran comunidad de creyentes donde nos insertamos y con quien colaboramos para empujar el mundo, cada uno desde su espacio, a ser mejor.
UNIDAD Y COMUNIÓN
Vivir en Cristo es llegar a decir: ya no vivo yo, Cristo vive en mí. La comunión con Jesús nos hace aspirar a ser una con Él.
La unidad se refleja en la diversidad de obras que tenemos, todas ellas, fruto de la comunión con Dios.
UNIVERSALIDAD
Geográficamente, nos insertamos en las diferentes culturas donde queremos ayudar a hacer nacer y crecer las Iglesias locales. Al ser misioneras, no nos podemos ceñir ni sujetar a un solo campo de acción.
Por ello, no ponemos límites a nuestro programa, sus confines son los del mundo, porque estos son los confines del Reino de Dios.